En términos generales, la selección de Brasil en la
competencia de mayor importancia internacional de la presente temporada se
lució. Fue el III Campeonato Mundial de Fútbol de Salón Femenino, rectorado por
la Asociación Mundial de Fútbol de Salón – AMFUTSAL; el evento donde las
salonistas que representaron al gigante del sur, sirvió como plataforma final
para que las mismas demostraran la gran importancia que para ellas significaban
la competencia anteriormente citada. La ciudad de Balaguer, en Cataluña fue
testigo de los pasos dados por las brasileras, además de indicar que no hubo
casualidades para ellas en dicha competencia.
En una pasada columna que escribí, la cual lleva
por nombre “Aroma del mejor talento femenino.” En el marco del II Campeonato Sudamericano
de Fútbol de Salón Femenino categoría absoluta que se jugó el pasado mes de
agosto del presente año, esto fue lo que quien suscribe apunto de la selección
de Brasil: “En cuanto a lo demostrado por las chicas que representan a Brasil,
es de reconocer, que su crecimiento competitivo de los últimos tiempos es de
considerar; los resultados obtenidos en las distintas competencias o
intercambios en los cuales han participado demuestran que ya es otro Brasil,
que está recuperando estatus y que están dispuestas a seguir avanzando".
Digan
ustedes hermanos del salonismo mundial si se han recuperado. Si bien es cierto,
amigos lectores, que las chicas de Brasil se apuntalaron el titulo en gran
forma; también es cierto, que dicha selección no ha perdido en tiempos regulares
un juego de características internacionales desde que las selecciones han
estado en manos de los directivos de la Confederación de Fútbol de Salón de
Brasil. El trabajo realizado por quienes dirigen ahora el fútbol de salón en el
gigante de la Amazonía tuvo los resultados esperados según la planificación.
El
subcampeonato quedó para Argentina; nuestras hermanas de Colombia tuvieron un
bien merecido tercer lugar; y completaron para el cuarto lugar al seleccionado
de las chicas de Paraguay. La colombiana Paula Botero con 11 goles fue la
máxima goleadora; la valla
con menos goles fue guardada por la brasilera Missiara Luiza. A la distancia un
gran abrazo de bendiciones, y muchas felicitaciones para mis amigas y amigos
salonistas de Brasil, quienes se titularon campeones del III Mundial de Fútbol
de Salón Femenino. Amigos lectores muchas gracias, y para contactos @joseceden.
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